Cercano al despoblado pueblo de Reveche, en la jurisdicción de Gumiel de Izán, aún se conserva un topónimo, La cuesta de San Lorenzo. Es, sin duda, reminiscencia del desaparecido monasterio de San Lorenzo y Santa Eugenia, en Gumiel de Izán. Se desconocen sus orígenes, pero se sabe de él que Fernando I y doña Sancha, su mujer, se unieron al monasterio de San Pedro de Arlanza en 1042. Según se desprende de la documentación, era un monasterio muy grande, bien construido, rico, abundante y bien provisto. Todas sus posesiones pasaron al dominio de Arlanza y es de suponer que guardase la misma regla que este monasterio, cuya autoridad perduró durante mucho tiempo.
Las noticias más antiguas y fidedignas que se conservan están relacionadas con el de San Pedro de Arlanza. Aunque existen varias referencias sobre el documento de donación, íntegramente aparece recogido por L. Serrano:
"En el nombre del Engendrador y del Engendrado, que redimió al mundo con su sangre, y del Espíritu Santo. En el nombre de él, yo, Fernando, rey, en unión de mi esposa Sancha, por nuestras almas ofrecemos un pequeño don a la casa de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo y por sus oraciones creemos ser liberados de las penas eternas y del fuego eterno. Damos al citado monasterio, para ayuda de sus habitantes, siervos de Dios, el monasterio de San Lorenzo y Santa Eugenia, situado en el territorio de Gumiel de Izán, con toda su heredad e integridad de sus términos. Los lindes o mojoneras son: desde aquel valle (Reveche) hasta el molino del prado (o sea el valle que sube desde Gumiel a Villalvilla) y desde el molino de la Laguna, de un valle al otro valle; y del valle hasta el camino que va a Tremello, y aquel prado en toda su integridad; y de aquellos vados hasta la fuente, y todo el monte del camino de Tremello hasta el camino que va a Oquillas y hasta pasada la loma, y de la otra parte desde el camino que parte del huerto de Santa Eugenia hasta la villa de Pinilla. Damos el citado monasterio y confiadamente confirmamos su integridad con sus entradas y salidas, con montes y fuentes, con terrenos de pastos, para que esté bajo el arbitrio y potestad del abad que rige la casa de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, de tal forma que así tenga potestad de talar y plantar en él y ningún hombre se atreva a roturar o realizar cultivo alguno; y si alguien se atreviese a hacerlo sea rey, conde o alguna autoridad o cualquier otra persona quede excomulgado de la fe católica y como castigo temporal pague en caución al rey cinco libras de oro, y restituya al abad del mismo lugar el doble o triple de lo que osare robar o llevarse de allá, y lo dispuesto por nos quede firme y estable para siempre. Fue hecha esta carta de testamento en las XII Calendas de Mayo, de la era en curso MLXXX (20 de abril de 1042)".
A finales del siglo XVIII todavía pervive el citado monasterio, aunque desconocemos en qué estado. Así se constata por los datos que envió desde Gumiel de Izán un informante anónimo a Tomás López, en vistas a realizar su inédito Diccionario Histórico Geográfico de España.
El Diccionario de Madoz (siglo XIX) recoge la información de otro comunicante y habla de restos en la cima de este punto geodésico: "en este despoblado de Reveche se encuentra una altura denominada de San Lorenzo; en cuya cima se encuentran ruinas y cimientos de un edificio, que unos creen fue convento de benedictinos, y otros una casa perteneciente al monasterio de Arlanza, que poseyó hasta su extinción la propiedad de los terrenos contiguos". Aunque es difícil precisar sus orígenes, Pedro Ontoria aboga por reminiscencias de la época visigoda:" en el día de hoy se vislumbran restos pétreos en la ladera sur de la cuesta, que algún trabajo arqueológico depararía resultados positivos de posibles restos visigóticos, vestigios que se encuentran en la cercana villa de Oquillas a cuya parroquia está anexa la ermita del Santo Cristo de Reveche".